Aprovechamiento de calor residual


Los elevados y crecientes costes energéticos, así como la necesidad de reducir las emisiones de CO2, han incrementado el interés por soluciones que minimicen las pérdidas energéticas y que posibiliten el aprovechamiento de calor residual.

La tecnología ORC (Organic Rankine Cycle) permite recuperar energía aprovechando el calor residual para producir electricidad adicional. Ello supone una mejora del rendimiento energético e incrementa el complemento de eficiencia energética de toda la instalación por un mayor aprovechamiento térmico de la instalación, derivando en cortos períodos de retorno y elevadas tasas de rentabilidad. Permite vender o utilizar la electricidad generada para autoabastecer al consumidor de energía eléctrica, independizando el sistema de la red.

Las aplicaciones directas son el aprovechamiento tanto del calor disipado en procesos de industrias intensivas en consumos de energía, como el aprovechamiento de gases de escape en motores y turbinas de grandes cogeneraciones, combustión de biomasa, procesos de secado, disponibilidad de agua caliente termal, geotermia, solar…. En cualquier caso, procesos industriales, cogeneración,…, se produce más electricidad sin consumir más combustible. Por ejemplo, en plantas de cogeneración con turbinas de gas el rendimiento eléctrico puede elevarse a valores próximos al 50%.

En ningún caso es necesario un sistema de tratamiento de agua o de obligar a sobrecalentamientos para evitar condensaciones no deseadas como en el caso de plantas de vapor.